Aunque los unicornios viven en la espesura de los bosques, de noche piden prestadas las alas a Pegaso y van a beber al único lugar donde desean hacerlo : Un árbol, en el confín de nuestra galaxia, que derrama el néctar de las estrellas que duermen escondidas en su copa.
Que bonito!!
ResponderEliminarCreo que un dia de estos acompañare a uno de estos para saborear ese nectar......
Besazos